Foto:J. CALDERA

No obstante la alternativa está en la determinación de un centro de recreo y diversión alejado de las viviendas.
Según la OMS, el nuevo límite planteado para evitar efectos nocivos sobre la salud es una exposición media nocturna anual que no debe exceder de los 40 decibelios (dB), el nivel de ruido equiparable al de una calle tranquila de una zona residencial. Y es que no sólo las exposiciones mantenidas superiores pueden causar insomnio, sino que la exposición a largo plazo a niveles superiores a los 55 dB, el nivel de ruido propio de una calle concurrida, puede desencadenar hipertensión arterial y otras patologías cardiovasculares como infartos de miocardio. Según la OMS, uno de cada cinco europeos está expuesto habitualmente a estos niveles de ruido.
En palabras del Dr. Srdan Matic, jefe del Departamento de enfermedades no transmisibles y medio ambiente de la Oficina Regional, “las nuevas directivas ayudarán a que los países reconozcan y aborden los problemas relacionados con el ruido y la salud. Basadas en una evaluación de la evidencia científica desarrollada por expertos durante seis años, los gobiernos tienen ahora mayores justificaciones para regular la exposición al ruido nocturno, así como una guía clara sobre cuáles deben ser los límites adecuados”.
No en vano, las investigaciones más recientes muestran una clara vinculación entre el ruido nocturno y diversos problemas para la salud, no únicamente el mero daño auditivo. Así, el ruido puede agravar diversas patologías, especialmente a través de su efecto distorsionador del sueño. Mientras las personas dormimos, nuestros oídos y nuestro cerebro continúan reaccionado a los sonidos. Las alteraciones en el sueño como el insomnio son los primeros efectos del ruido nocturno, y éstas pueden derivar en enfermedades psiquiátricas. Por otro lado, el ruido puede desencadenar enfermedad cardiovascular prematura, la primera causa de muerte en los países desarrollados. Así, por ejemplo, el ruido nocturno de un avión puede incrementar la presión arterial.
Los niños, los más vulnerables
Los niños, al dormir más horas que los adultos, están más expuestos al ruido nocturno. También los ancianos y los enfermos crónicos son más vulnerables a este tipo de problemas e, igualmente, los trabajadores por turnos se ven afectados en mayor medida debido a que su estructura de sueño ya está distorsionada habitualmente por su actividad laboral. Del mismo modo, las personas que no se pueden permitir vivir en zonas residenciales tranquilas o cuyas viviendas no están suficientemente aisladas pueden sufrir por este tipo de problemas.
Según la OMS, las nuevas directrices complementan la reciente directiva sobre el ruido ambiental de la Unión Europea que requiere a los países el establecimiento de un mapa de las áreas más ruidosas, pero que se queda corta a la hora de establecer los límites. Así, algunas de las intervenciones sugeridas por la nueva guía incluyen el desvío del tráfico de zonas con hospitales o colegios y la implantación de barreras acústicas. Del mismo modo, la OMS considera que las áreas más ruidosas podrían ser adecuadas para el establecimiento de oficinas, lugares en los que la gente no se encuentra por las noches. A nivel individual, medidas sencillas como colocar la cama en el lado más tranquilo de la vivienda o mejorar el aislamiento acústico de las ventanas puede contribuir a reducir el impacto acústico nocturno.
Como afirma el Dr. Rokho Kim, director del proyecto, “del mismo modo que la polución y los químicos tóxicos, el ruido ambiental daña la salud, pero aunque casi todo el mundo está expuesto a demasiado ruido, su importancia se ha minimizado al tratarlo como un inevitable factor de la vida urbana y no ha sido evaluado ni controlado tanto como otros riesgos. Esperamos que estas nuevas directivas contribuyan al desarrollo de una mayor conciencia sobre el ruido y estimulen a gobiernos y autoridades locales a invertir esfuerzos y recursos económicos para abordar este problema creciente, especialmente en las ciudades”.
(Fuente PEACRAM)
La Madrila acumula 53 denuncias en los dos últimos meses por incumplir el horario ( El Periódico Extremadura - 04/11/2009 ) Esto afirma el Sr. Jurado, Concejal de Seguridad Ciudadana al Periódico de Extremadura. Lo que no nos dice el Sr. Concejal es cuántas han sido resueltas. Hay que tener en cuenta que al tratarse de faltas leves han de ser resueltas en el plazo de un mes según el Reglamento de Procedimiento Sancionador
, y no siendo así se produce la caducidad, por lo que poco o nada nos da que la Policía Local levante actas.
Por eso nuestro Presidente le comentó lo siguiente en su blog, y que la Junta de esta Asociación suscribe:
Sr. Vara:
Por delante nuestra repulsa, no sólo por el asno torturado hasta la muerte en Torreorgaz, sino por todos los que casi a diario son "eliminados" de una forma cruel (Perros, gatos, etc.) Observe la fotografía. Ese gatito fue muerto tras o en pleno "botellón". Fenómeno que, como dice Rasputín en su entrada, cada día que pasa sin ser atajado nos llevará a situaciones peores.
Y es que la existencia, por sí, de las leyes no soluciona nada. Lo que soluciona las cosas es la aplicación de la Ley.
Mientras que ustedes, los que gobiernan, no tomen la determinación de aplicar y llevar a efecto las normas (Leyes, reglamentos, ordenanzas, etc.) que ustedes mismos dictan, nada se podrá conseguir con manifestación de ningún tipo.
Como recordará (o al menos eso espero) me entrevisté con usted el pasado mes de junio. El motivo de la entrevista fue la situación de tortura por la contaminación acústica que sufrimos muchos ciudadanos (Botellón, bares, conciertos ilegales, etc. etc.)Siempre agradeceré que me recibiera, pero finalmente salí decepcionado ¿Sabe por qué? Porque sentí que desde su autoridad no se iba a hacer nada al respecto, máxime cuando me preguntó ¿Tú crees que si aplicaramos la legislación a rajatabla, conseguiriamos algo?
Pues sí, Presidente. Igual que le contesté entonces le diría ahora: ¿Acaso no nos ponemos el cinturón de seguridad en los vehículos por miedo a la sanción?. Apliquen las normas que ustedes mismos legislan, y dejense de manifestaciones y zarandajas que no conducen a nada. Aunque si su propuesta -a mi juicio equivocada- es sincera, como así lo creo, deseariamos la misma sensibilidad para los torturados por la contaminación acústica.
Saludos cordiales.
Antonio Durán
2 de noviembre de 2009 21:45